
Este pequeño botón localizado en la parte superior de la vagina, crece y se hincha, como si se tratara de una especie de pene, se llama clítoris, es ese enigmático órgano sexual femenino cuya única función es brindar placer, y siendo así, es el único órgano humano que solo tiene una sola función.
Sin embargo, no todo es placer cuando hablamos de clítoris; también puede presentar dolor, infecciones, falta de sensibilidad o todo lo contrario.
Estos 5 problemas que afectan al clítoris te darán una idea de las complicaciones que puede sufrir este órgano fundamental de la vida sexual femenina.
¿Por qué a veces duele el clítoris?
El clítoris es un órgano extremadamente sensible constituido por miles de terminaciones sanguíneas y nerviosas. Su sensibilidad es tal que, a menudo, su estimulación puede resultar dolorosa.
Si el clítoris duele, frecuentemente la raíz del problema está en la forma como se estimula o en algún cambio en el ambiente genital.
Cuando la estimulación clitoriana se realiza con demasiada fuerza, con las uñas largas, con torpeza o con algún juguete sexual que vibra con mucha potencia, es probable que la sensación sea de dolor y no de placer. En este caso hay que detenerse, lubricar correctamente y encontrar una manera más suave de acariciar el clítoris, pues se trata de un órgano delicado.
En otras ocasiones el dolor puede ser causado por la resequedad provocada por condiciones como la menopausia, los cambios hormonales o los efectos secundarios de algún medicamento. En este caso, utilizar un lubricante a base de agua en cantidades abundantes puede ayudar a resolver el problema.
¿Por que no siento el clítoris?
En algunos momentos, el estrés o el estado de ánimo de una mujer puede afectar su sensibilidad clitoriana. Esta condición, diferente de la anorgasmia que ocurre de manera casi permanente, es pasajera y a menudo se corrige al encontrar el origen del problema. Descanso, tranquilidad mental, un cambio en la rutina sexual, pueden ser medidas suficientes para resolver este contratiempo.
¿Se puede recuperar la sensibilidad del clítoris?
Sin importar cómo se intente estimular, un clítoris insensible es incapaz de sentir excitación ante las caricias realizadas con la mano, la lengua o algún juguete sexual, incluso si se usa algún lubricante especial para inducir sensaciones. Este caso se clasifica como anorgasmia, definida por la Clínica Mayo como la dificultad regular para alcanzar el orgasmo luego de una amplia estimulación sexual.
Generalmente, la anorgasmia tiene una raíz psicológica, por lo que una mujer que sufre esta condición debe acudir con un sexólogo para revisar su vida sexual y determinar las razones de su falta de excitaciónSe cree que un uno por ciento de las mujeres sufren esta condición.
En ella, la mujer se encuentra la mayor parte del tiempo al borde del orgasmo, por lo que cualquier roce o interacción genital puede desencadenar el clímax.
Aunque de principio pueda sonar atractivo, a la larga este síndrome puede resultar muy incómodo, pues la excitación sexual es permanente y un paseo en bicicleta, un movimiento en una silla o incluso un pantalón muy ajustado pueden desencadenar una respuesta sexual difícil de controlar.
En general, esta condición se asocia con otras complicaciones de salud como várices en la pelvis, una vesícula hiperactiva o un desorden neurológico. Ya que se trata de un fenómeno poco investigado y poco difundido, es importante consultar con un especialista
¿Tengo una Inflamación del clítoris?
Al igual que la vagina, el clítoris es propenso a sufrir infecciones bacterianas o por hongos. Candidiasis, herpes, pruritos y rasguños son algunas condiciones que pueden desencadenar una infección en la zona. Si existe inflamación, comezón o dolor y se sospecha que el origen es bacteriano o micótico, lo mejor es acudir con un ginecólogo para tratar correctamente la infecciones.
La investigación de la sexualidad femenina se ha visto condicionada durante siglos por una visión androcéntrica en la que se creía que la estimulación a través de la penetración era imprescindible para que una mujer alcanzase un orgasmo.
Es una teoría generalmente aceptada que el pene y el clítoris son de hecho el mismo órgano, o lo eran en origen cuando el feto comienza a desarrollarse durante el embarazo en el momento en que toma una forma masculina o femenina.
Esto significa que en algunas operaciones y procesos de cambio de sexo se puede emplear cirugía y tratamientos hormonales para reconvertir uno en otro. No es un proceso sencillo, pero sí que es posible.
- La sexóloga Pamela Madsen recopila en Psychology Today algunas curiosidades sobre el clítoris, un órgano, según la doctora Manuela Gómez Pérez -miembro de la Sociedad Española de Medicina y Cirugía Cosmética (SEMCC)- básico, imprescindible, siempre dispuesto y a nuestro servicio y que va a satisfacer, sin duda, todas nuestras fantasías…
- Entre 50 y el 75% de las mujeres necesitan tocarse el clítoris para alcanzar el orgasmo. Por tanto, más de la mitad de las mujeres no alcanzan el climax sólo a través de la penetración.
- El clítoris crece a lo largo de la vida. Este órgano femenino no solo cambia de tamaño durante la etapa de crecimiento, sino que con la menopausia puede duplicar su tamaño respecto al que tenía la mujer cuando era adolescente. Además, las mujeres embarazadas que han dado a luz lo tienen aún más grande.
- Cada clítoris es distinto en tamaño y forma, pero también en sensibilidad. Algunos clítoris se excitan con sencillas caricias y otros necesitan ser presionados con más fuerza. De todas formas, este órgano requiere tiempo para conocerlo a la perfección.
- El clítoris, al contrario de la vagina, contiene 8.000 terminaciones nerviosas. Solo la punta del clítoris, la más visible, tiene el doble de terminaciones nerviosas que el pene.